Techo de Cristal: la barrera invisible que impide a las mujeres acceder a altos cargos

¿Te has puesto a pensar si en tu trabajo hay mujeres en cargos gerenciales? De ser así, ¿se les presta atención a sus ideas o se les respeta al igual que a los hombres? Si tu respuesta es no, probablemente en tu empresa existe un “Techo de Cristal”. Pero, ¿qué es y de qué se trata este fenómeno? En WoomUp te lo enseñamos.

La expresión “Techo de Cristal” se refiere a los obstáculos invisibles que las mujeres enfrentan cuando buscan ascender en sus carreras profesionales y acceder a cargos directivos.

Una forma simbólica de interpretarlo es que a las mujeres se les permite mirar este techo, pero se les impide traspasarlo. De esta forma, tienen muchas dificultades para llegar a puestos gerenciales.

El Techo de Cristal es un concepto que también responde a cuestiones sociales y culturales. En el libro “Lean In” de Sheryl Sandberg, hay un estudio donde los propios gerentes reconocieron que no les otorgaban cargos con responsabilidades mayores a mujeres, argumentando que ellas son más emocionales y que tienen muchas responsabilidades externas al trabajo.

Los estudios avalan que tener a mujeres en cargos directivos aumenta las ganancias y productividad de las empresas. No obstante, ¿sabías que en Chile solo un 5% de las empresas tiene mujeres gerentes generales? ¿O que el mundo deja de ganar US$28 trillones por no tener mujeres en la misma capacidad productiva que los hombres?

Uno de los efectos producidos por el Techo de Cristal se ven reflejados en  las cifras entregadas por la Unesco: un 49% de la fuerza laboral en el mundo está compuesta por mujeres, pero solo un 20% de ellas ocupa puestos gerenciales.

Muchas veces los prejuicios son difíciles de percibir y medir, pero una forma de eliminarlos es propiciando la inclusión de las mujeres en los equipos de trabajo, y dando a conocer más historias de mujeres ejecutivas exitosas.  

Para comenzar generando cambios, los especialistas señalan que debemos ser conscientes que las mujeres han cerrado la brecha educacional, entrando en el mercado de empleos no tradicionales a un ritmo muy alto, manejando a sus familias y sus carreras exigentes y demostrando sus habilidades en cada sector laboral de mundo.

Las cifras y estudios avalan que actualmente hay una importante pérdida de talento que de revertirse supondría un importante beneficio económico y social para el mundo.